Time Emperor (Champion)

"Llegó el momento...."

Levantándose de su trono, Solomon chasqueó los dedos.

Sus ojos se abrieron y su clarividencia cruzó la distancia directamente hacia el campo de batalla...

"¿Estás seguro Caster? Aún falta un poco"

"No, tiene que ser ahora, su punto más débil no llegará si no presionamos"

Solomon negó...

Sin destino, no había forma que pudiera mirar el futuro, por lo que la única información que tenía sobre el monstruo era a través de Chaldea, la grietas en el Corona traslúcida permitieron la comunicación con el doctor Romaní.

Romaní en Chaldea estaba feliz de haber conservado al menos un anillo de Dios, sin esto sería imposible.

Sobre está información tenía que calcular el momento exacto donde está el punto de inflexión sobre el monstruo.

Sin embargo este punto de inflexión no se abrirá a menos que intervenga, el monstruo es muy confiado lo que ha dado esperanza a la humanidad.

Pero está confianza también radica en su absurda fuerza y sus Evas.

Solomon puede convocar a los 72 pilares demonios, pero ante un 'Trono' estos demonios no son diferentes de tigres de papel, no subestimar a quien Dios maldijo.

"¿Es así? ¿Qué pasa con las Evas? ¿Puedes enfrentarlas?"

Marisbury aún estaba dudoso, conforme la base de datos del monstruo, atacar ahora no era buena idea, no antes que esas Evas caigan.

"No hay problema, alguien más se encargará de las Evas..."

"¿Existe alguien capaz?"

"Si, su enemigo mortal..."

Marisbury frunció el ceño, no recordaba a nadie tan capaz como para enfrentarse a ese horror de las mujeres del Génesis.

"Oh, es ella..."

De repente una imagen de una chica vino a su mente o para ser exactos la de dos chicas coquetas pero tan peligrosas como el mismo veneno.

Incluso Marisbury que tenía a un Servant Coronado no estaba seguro de derrotar a este dúo de maestro y Bestia.

Ambas eran anomalías de grandes desastres.

"Si son ellas, no habrá problema, ¿ayudarán?"

"Por supuesto, está en su instinto, no pueden escapar...."

Cómo una serpiente acechando a su presa, esta Bestia ya había llegado al campo de batalla desde el principio y ahora que Adán está fuera, definitivamente no iba a perderse esta gran oportunidad.

"Es su destino..."

Con estas palabras la iglesia aún intacta de Rumanía tembló y un enorme castillo del cielo se elevó, la Reina de Asiría había terminado su noble Phantasm, ya no había necesidad de seguir mirando, está era la batalla final.

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"Mouu Darling es tan travieso, le gusta mucho jugar..."

En lo alto de la torre de cristal, Miku inflo sus mejillas en insatisfacción, Yuki y las chicas con trono eran iguales, podían poner fin a esta guerra si activarán el Dominio, pase lo pasé ante la fuerza de un Campeón, los héroes son tigres de papel, pero ellos no lo hicieron, prefirieron jugar y derrotarlos uno a uno.

Aunque Yuki había acelerado demasiado la guerra al invocar a todos de una sola vez, pero esto sigue siendo un acto.

Ni Yuki y los otros Tronos sabían lo que pasaría si la voluntad del mundo pensaba que esta guerra era demasiado aburrida.

¿Y si envía a un 'UO' para equilibrar las cosas?

O tal vez envié a la nave de origen intergaláctica de los Dioses Olympus.

No es que Yuki no tenga confianza pero era demasiado para el 'Guión', además no sabían si estos aumentan su poder a través del Destino(Guión) o alguna otra forma, para Yuki quien le gusta estar en el control, dejar el azar en la manos de otro es un no.

"¿Qué importa? Cuando recuperemos las llaves nos vamos de aquí"

Para Origami no importaba este mundo, su objetivo era claro, solo necesitaban actuar bien.

"Supongo que tienes razón, ¿pero está bien? Ella será libre..."

Pensando en esa mujer de cabello plateado, Miku como Lirio estaba encantada y a la vez preocupada.

Mio Takamiya es el espíritu de origen, para esta mujer Miku no sabía cómo sentirse al respecto.

"Está bien, ella ama a Onii-chan.."

Mirando hacia la profundidad de la torre de cristal, Origami estaba segura, no hay espíritu que pueda resistir la tentación de la resonancia.

En ese momento Eggy y la mujer encapuchada conectaban las llaves...

"Shinji, ¿dónde estás?"

Las llaves inconscientes frente al gran Grial frenaron todo su poder mágico hacia la chica en medio de ellas, Rin Tohsaka abrió los ojos o eso parecía porque a diferencia de Rin quien tenía el pelo negro, está 'Rin Tohsaka' tenia el cabello blanco como la nieve.

"Mio Takamiya ¿cierto? Necesito que hagas algo por mi"

Eggy se cruzó de brazos hacia 'Rin' quien con una mirada perdida la miró por unos segundos antes de mirar a su alrededor en confusión.

No sabía lo que estaba pasando, tenía el cuerpo pesado y la necesidad de encontrar a su amor verdadero.

"Shinji...Shinji... ¿Dónde?... Shinji"

"No lo busques, por ahora no está en este mundo, pero muy pronto aparecerá frente a ti"

"¿Eh?"

"No hay momentos para explicarte todo, pero puedes entender que ahora estás usando un cuerpo que no te pertenece..."

Como un ancla, al inicio de la invocación Yuki seleccionó a Rin Tohsaka como portadora del Virus apocalipsis e implantó la conciencia de Mio Takamiya en ella, tal como lo hizo Mana Ouma con Inori Yuzuriha en Guilty Crown, esto aumentó las estadísticas de Rin para que su cuerpo mortal sea capaz de soportar una fracción del poder de Mio Takamiya.

Todo para un solo propósito.

"Lo que está frente a ti es el Gran Grial, necesito que entres ahí y recuperes el corazón de tu amorcito"

"¿Amorcito? ¿Shinji?"

"Si, Shinji..."

"..."

Mio parpadeo en confusión y volteó la cabeza, había una extraña sensación en su cuerpo, como si algo lo llamara a través del Gran Grial.

Miedo, ira, tristeza y amor, muchas de sus emociones aparecían y desaparecían en unos segundos...

"¿No quieres traerlo de vuelta? Si no entras ahí y vuelves, tú amorcito nunca será libre... No quieres decepcionarlo ¿verdad?"

"Shinji... No, no... no, no...¡No! ¡Lo haré! ¡Si es por Shinji!"

Al verla dudar, Eggy susurro como un demonio, lo que provocó que la mirada de Mio cambiara, su cuerpo tembló y sudor frío corrió por su mejilla...

Aún recordaba cuando era un Rey demonio, Yuki la rechazó.

Definitivamente no quería que eso pasara...

"Está decidido, trae ese corazón y aplasta a todo lo que se te cruce en el caminó, ya sea esas puertas y sus guardianes..."

"¡Si! ¡Definitivamente haré feliz a Shinji!"

Sin dudar más, Mío entró corriendo hacia el Gran Grial....

"¿Estará bien mi lady Reina? Se enfrentará a la inhibición sin restricciones y todo el poder..."

Preguntó con preocupación la mujer encapuchada.

Todos aquellos que quieren alcanzar la 'Raíz' serán perseguidos por la fuerza de inhibición y hasta ahora casi nadie ha regresado, porque es casi imposible de alcanzar y los que lo logran solo caminan alrededor de ella sin tocar realmente la 'raíz'.

A menos que seas la 'Raíz' misma o estés conectado a ella, no alcanzarán la 'raíz'...

Mio por otra parte no sólo entrará a la raíz, también debe superar las puertas y quitar el 'corazón' de la 'Raíz' y regresar.

No importa quien sea, esto era un suicidio e imposible de hacer.

"No hay necesidad de preocuparse, nadie puede detener a esa mujer..."

Eggy no estaba preocupada...

Mio estaba loca y con su fuerza absurda, era muy peligrosa, puede que incluso Yuno no sea ni una fracción de lo peligrosa que es Mío Takamiya ahora, su amor ahora trasciende el Mundo.

Con esta mujer conectada al Réquiem, la que debería tener cuidado es la fuerza de inhibición...

Tal como lo dijo Eggy, la primera puerta se desbloqueo con facilidad con la primera llave, así mismo el primer guardián apareció frente a Mio...

"Aquí viene... Monstruo..."

Este era un viejo conocido, guardia de la contra-fuerza.

Archer EMIYA, había estado esperando, preparó muchas de sus armas, liberando su barrera Inherente al máximo...

*BOOM

Disparando el noble Phantasm, ante una fuerza como el monstruo, EMIYA no se atrevió a ser descuidado, estás proyecciones explotan al contactó y toda el área de la puerta ardió en llamas.

Ante un bombardeo sorpresa de este nivel, incluso un poderoso espíritu heroico resultaría herido..

Pero á Mio Takamiya no le importaron estos pequeños proyectiles, siguió corriendo ni siquiera miró a EMIYA su único objetivo era el corazón de Shinji y la puerta que la detenía, su traje astral blanco como las flores se formó y látigos de este se movieron a una velocidad que cuando EMIYA reaccionó ya había regresado al trono de héroes, ni siquiera era una batalla.

La diferencia de fuerza es absurda, si ni siquiera pueden atravesar su traje astral, olvídense de detenerla.

Por eso no había nadie mejor que Mio para tanquear a las dos más grandes fuerzas de este mundo.