Classroom of the elite: Ayanokouji Kiyotaka en clase C

Chapter 7: Capítulo 6: Revelando mentiras



De alguna manera, ya me lo esperaba. Era lógico que, teniendo entre nosotros a personas consideradas futuros prospectos de la nación, al menos uno de ellos levantara la mano. Si bien para mis estándares la cantidad de preguntas fue sorprendentemente baja, no era algo que me sorprendiera por completo. Al final, no se puede tener todo en esta vida. Sin embargo, no pude evitar preguntarme si entre estos pocos, uno o dos podrían tener la capacidad de liderar a la clase, si las circunstancias se daban de esa manera, me aseguraría de hacer el mínimo esfuerzo posible y dejar que los demás cargaran con la mayor parte del trabajo. Ese sería el resultado más favorable para mí.

Como no presté atención a los rostros de mis compañeros durante la ceremonia de ingreso, ni sabía cómo se llamaban ni qué tipo de personalidades tenían. Sin embargo, dependiendo de las preguntas que realicen, podría ser el momento adecuado para evaluarlos y, quizás, permitir que algunos de ellos asuman el liderazgo. Todo sería cuestión de observar, después podría determinar la cantidad de trabajo que debería realizar.

''Parece que dos de sus compañeros tienen algunas preguntas, así que les pido que se queden hasta que aclaremos sus dudas'', dijo Sakagami, dirigiéndose al grupo con una calma calculada. Su tono no dejaba espacio para la oposición; simplemente esperaba que todos aceptaran sin cuestionarlo.

Seguro que le gusta tener el control ...

Los demás estudiantes parecían no tener objeciones, y la mayoría se asomaban con un leve movimiento de cabeza. Aunque varios tenían una apariencia algo intimidante, como si fueran alguna clase de pandilleros, su comportamiento era razonablemente sensato. Ninguno protestó por perder unos minutos más de su tiempo solo para escuchar las dudas de un par de compañeros, con quienes compartirían el aula durante los próximos tres años. En el fondo, sabían que mantener una actitud tranquila podría evitar futuros conflictos innecesarios.

''Como no veo ningún problema, ¿Por qué no iniciamos contigo, Kirigiri-san?''

''Como te guste, sensei. Mi pregunta es la siguiente: ¿Hay alguna razón en particular por la que se nos llama 'puntos privados' en vez de simplemente 'puntos'? A lo largo de la explicación, solo se ha mencionado esa moneda, pero no veo por qué existe esa distinción. Además, me resulta extraño que nos entreguen 100.000 yenes mensuales, siendo solo estudiantes de secundaria. ¿No es un tanto excesivo?''

La sala se sumió en un silencio absoluto tras la pregunta de Kirigiri. En ese momento, muchos de los estudiantes, incluidos algunos de los que parecían los más desinteresados, observaron con atención. La pregunta fue aguda, astuta y, sobre todo, reflejaba una mente fría que no aceptaba respuestas sin cuestionarlas. Me pregunté que Kirigiri tenía tan claro lo que había que preguntar. Si yo fuera más impulsivo, quizás hubiera hecho una pregunta similar. Al parecer, compartía algunas de mis preocupaciones, aunque aún no comprendía que, al tratarse de una escuela como esta, las respuestas honestas no iban a llegar tan fácilmente.

''Esa información no es posible revelarla por el momento'', dijo Sakagami con una calma palpable, como si estuviera repitiendo una frase que le habían enseñado. ''En cuanto a tu siguiente pregunta, la cantidad de puntos que se ha entregado a cada uno de ustedes se debe a que esta escuela evalúe los talentos de sus alumnos. Todos han aprobado el examen de ingreso, lo que demuestra su potencial y valor. La escuela ha determinado que, calculando en esa evaluación, todos merecían recibir 100,000 puntos privados este mes. ¿Eso satisface tu curiosidad?'' 

Su tono parecía cortante, como si quisiera poner fin a la conversación lo más rápido posible. Había algo extraño en su manera de hablar, una especie de evasión sutil que se contradecía con su actitud aparentemente preocupada, como si fuera consciente de que estaba limitado por algo o alguien. Mi intuición me decía que estaba siendo controlado de alguna manera por fuerzas fuera de su alcance, aunque supuse que debía tratarse de la misma escuela.

Lo que más me llamó la atención fue cómo enfatizaba las palabras "este mes" y "puntos privados", como si hubiera una distinción o un significado oculto detrás de esas frases. Estaba claro para mí que no iba a ofrecer más detalles a menos que fuera estrictamente necesario, probablemente debido a las mismas reglas de la escuela que él mismo debía seguir.

''Sí...'', respondió Kirigiri en voz baja, bajando ligeramente la cabeza, visiblemente insatisfecha con la respuesta, aunque no parecía dispuesta a presionar más.

Sakagami, como si no hubiera notado el descontento de su estudiante, continuó con su discurso de manera casi mecánica. ''Bueno, como parece haber resuelto la duda de Kirigiri-san, ¿por qué no seguimos contigo, Ryuen-kun?''

La mirada de todos se desvió hacia el chico conocido como Ryuen, que no perdió ni un segundo para intervenir. Con un gesto despreocupado y con una actitud claramente desafiante, Ryuen levantó la voz.

''Sakagami, dejémonos de tonterías. No me vengas con lo de los 'dos ​​pies derechos'. Sé perfectamente que aquí algo no huele bien. Todo este sistema apesta más que un basurero. Hay cámaras por todas partes, completamente ocultas. Esta escuela esconde tanta mierda que ni siquiera se esfuerzan por disimularlo. ¿Por qué no nos dices qué está pasando realmente?''

''Primero que nada me gustaría pedirte que controles tu temperamento Ryuen-kun. Lo único que puedo decirte es que una de las razones de la colocación de tantas cámaras es para evitar el acoso escolar. Muchas escuelas han implementado estos métodos, incluso ocultándolas de forma minuciosa para que no sean detectadas por los estudiantes. La idea es que, al estar separados de sus padres, estamos estrictamente obligados a velar por su seguridad, lo cual hace que la vigilancia sea necesaria.'' 

Aunque su tono era el mismo de siempre, había algo en su voz que sugería una incomodidad sutil, como si estuviera hablando con la obligación de defender una postura que no podía cambiar. Seguramente, la verdadera razón detrás de la saturación de cámaras no era solo una cuestión de seguridad, sino también un mecanismo para asegurarse de que los estudiantes no pudieran interferir con el sistema de puntos privados. Desde mi punto de vista, que claramente era el de un observador externo, parecía evidente que Sakagami estaba tratando de contener información más importante que simplemente controlar el acoso escolar. Y, al parecer, eso no se le escapó a Ryuen.

''Lo que quiero decir es que, al estar en este tipo de ambiente, es inevitable que se pongan medidas estrictas. Las cámaras, las cuales también graban audio, son una forma de asegurar que los estudiantes estén en un entorno seguro y controlado, y no puedan eludir las reglas de la escuela. Como dije antes, esto es por su propio bien y por la integridad del sistema'', continuó Sakagami, sin siquiera alterar su expresión en el rostro. Pero, por un segundo, me pareció que su mirada se oscurecía, como si estuviera dejando escapar algo en sus palabras. Tal vez no solo las cámaras servían para garantizar la seguridad, sino también para vigilar que no se filtre información importante sobre el sistema de puntos.

La respuesta de Sakagami parecía, una vista simple, una justificación lógica y sencilla, pero, para mí, había algo más. La pregunta de Ryuen había sido muy buena, sin duda, pero por mucho que lo intentara, no obtendría más que respuestas vacías. Los hilos de este sistema estaban demasiado bien atados como para permitir que alguien los deshilachara fácilmente con la habilidad que había demostrado hasta el momento.

''Primero que nada están esas cámaras que están en toda la puta escuela, luego está todo ese discurso barato diciéndonos que recibiríamos 100 000 puntos, ¿Crees que me tragaré ese cuento?'' Muchos de la clase habían tomado sus palabras, aunque rudas, razonables.

''No puedo decirte nada al respecto. Solo puedo decirte esto, ten cuidado'' dijo mientras agarraba sus cosas indicando que no respondería más preguntas.

''¿Alguien tiene alguna otra pregunta para que me pueda retirar?'' dijo mientras daba una sonrisa, que a decir verdad, me parecía asquerosa.

' Suspiro, no hay remedio ' pensé, mientras me resignaba a levantar mi brazo de manera 'tímida', como si fuera un gesto casual y sin importancia, cuando en realidad estaba bien consciente de lo que estaba haciendo.

''Oh, parece que otro de sus compañeros tiene una pregunta, Ayanokouji-kun, ¿Cierto?'' dijo mientras regresaba a poner una cara sería.

''Si, quería preguntar hasta qué punto se pueden llegar a utilizar los puntos privados'' le preguntó con la misma expresión apática, como si no me interesara que me respondiera o no, aunque ese era el caso, ya que no era necesario decirme cosas que ya se.

''¿Puede elaborar por favor?, no creo haber comprendido correctamente su pregunta'' dijo Sakagami mientras no podía ocultar su sonrisa.

''Dijo que se puede comprar cualquier cosa'', respondí de forma tranquila, ''por lo que quiero saber cuánto costaría el paquete completo de información sobre este sistema.''

Mis palabras eran calculadas, y el hecho de que planteara esta pregunta tan abiertamente probablemente sorprendió a varios en la sala, pero tenía que saber hasta qué punto se podía ir con el sistema de puntos. Algunos de los estudiantes ya parecían haber comenzado a conectar los puntos, lo que indicaba que no todos eran tan ingenuos como lo parecía en un principio. Ryuen, en particular, parecía haber entendido la implicación. Bien por ellos, supongo.

''Bueno... en realidad si se puede, pero sería un costo MUY alto'' dijo mientras regresaba a quitar la expresión de su rostro, enfatizando la palabra 'muy' en la estructuración de su oración.

''¡Dinos el precio de una jodida vez!'' dijo Ryuen con algo de exasperación, parecía que su naturaleza era algo volátil, lo cual le quitaba algunos puntos, pero tampoco era tonto.

Sakagami, visiblemente molesto por la interrupción, tomó una respiración profunda antes de responder. Parecía que había esperado este tipo de preguntas, pero aún no estaba dispuesto a revelar todo de manera tan sencilla.

''Voy a ignorar el tono que estás usando en este momento y te voy a decir que el precio de la información sería de 1 millón de puntos'' Santa madre de cristo ...

Sabía de que iba a ser un precio muy alto, pero no esperaba que fuera tanto. Siguiendo esa línea de pensamiento 1/4 de los alumnos de este salón tendrían que dar todos los puntos que le habían dado el mismo día. Sin embargo, el precio no era tan desmesurado si se consideraba el valor de la información que proporcionaría. Tener acceso a ese conocimiento podría dar una ventaja crucial frente a otros, algo que ningún estudiante podría ignorar.

Pero no era solo eso. Ese millón de puntos era una inversión que, aunque temporal, podría cambiar el rumbo de la competencia entre clases. Sin embargo, había algo que no podía dejar de notar: el sistema de puntos privados solo otorgaría ventajas a corto plazo. Con el tiempo, los que lograrán obtener información de manera alternativa o a través de otros medios podrían aprovecharla sin tener que pagar esa exorbitante cantidad.

''Bien... muy bien, excelente. ¡De puta madre, kukuku!, mañana te daré una respuesta de si voy a comprar esa información'' dijo mientras escondía su rostro utilizando su mano.

''Está bien, los dejo para que discutan acerca de cual será su respuesta'' dijo mientras se retiraba por la puerta dejándonos con un ambiente incomodo, que rápidamente se rompió por Ryuen, que se dirigió al escritorio de Sakagami sentándose encima, como si es que no le importaba que ese lugar anteriormente era ocupado por el profesor de esta clase.

''Bien retrasados. Para ustedes es un placer conocerme, soy Ryuen Kakeru. A partir de hoy será el líder de esta clase. Así que mi primer mandato será que cada uno diga su nombre, habilidades y lo que planea hacer. La única regla que pondré, es que el que se interponga en mi camino, lo aplastaré. kukukuku''

Parece que es mucho más problemático de lo que esperé en un inicio. Que problemático .


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